Un paseo otoñal
Como seguramente os habré comentado en varias ocasiones,
una de las estaciones más bellas de mi tierra es el otoño.
El otoño es cuando los chopos se visten de oro y plata
dándole la bienvenida a la época de lluvias y frescas temperaturas.
Es cuando los niscalos comienzan a adornar los suelos de los bosques
y los paseos por el campo se convierten en uno de los quehaceres favoritos de muchos.
El otoño es cuando los arboles de hoja perenne toman los más bellos tonos verdosos
y los de hoja caduca se preparan para cambiar de aspecto durante una temporada.
Es cuando el sol da la justa tregua para salir a pasear a la hora deseada
para recorrerse las calles, callejuelas y rincones más variopintos de la parte antigua de la ciudad.
El otoño es la época en la que Cuenca lanza una invitación para conocerla a fondo
que nadie debería perderse.
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